Viaje Cultural en Asia – Bután
El Reino del Dragón
Bhután. El Reino del Dragón.
Espiritualidad en los monasterios fortaleza, o dzongs, que custodian las ciudades, y en los templos que salpican las aldeas. Los molinos rezan con el agua de los arroyos, y las banderas de plegaria con el viento junto a la carretera. Un país distinto, suspendido entre montañas, en la cordillera más alta del planeta.
Un reino cerrado al mundo hasta hace apenas tres décadas y ahora abierto a golpe de parabólica: la televisión e Internet llegaron en 1999.
Junto a las nieves eternas conviven la rueca y el ordenador, el traje tradicional obligatorio y el vaquero de tapadillo.
Las distancias se miden en tiempo, y el tiempo avanza o retrocede en cada curva del camino.
Como antaño, la joven Dechen teje a la puerta de casa. Más allá, Thinley tensa su arco infantil —la puntería es el deporte nacional—.
Ya en la capital, Thimphu, el veinteañero Dhendup maneja el ratón con el pelo engominado. La tradición sobrevive, la modernidad se asoma.
Mientras, los amuletos contra los demonios siguen siendo artículos de primera necesidad. La magia forma parte de la vida.
(Texto El País, ver)
Un viaje al corazón espiritual del Himalaya
Viajar a Bután es adentrarse en un mundo donde la espiritualidad marca el ritmo cotidiano.
En los valles suspendidos entre la niebla, los monjes meditan en templos colgados de los acantilados, como el famoso Nido del Tigre (Taktsang), uno de los lugares más sagrados del país.
Las campanas repican con el viento, y las montañas parecen custodiar un secreto ancestral que solo se revela a quienes llegan con respeto y curiosidad.
Aquí no se mide el progreso en cifras económicas, sino en Felicidad Nacional Bruta.
Bután conserva una armonía rara en el mundo moderno: la de un pueblo que ha sabido mantener su identidad frente al paso del tiempo.
Una experiencia Kora Trek: cultura, naturaleza y conexión humana
Con Kora Trek, proponemos un viaje cultural y de descubrimiento que combina la belleza de sus paisajes con el alma de su gente.
Recorreremos los valles de Paro, Punakha y Thimphu, explorando monasterios, mercados locales y aldeas donde la vida se detiene con el canto de los pájaros.
Este viaje está pensado para quienes buscan algo más que un destino: una experiencia íntima, una pausa consciente, un reencuentro con lo esencial.
Entre montañas, incienso y sonrisas, descubrirás que viajar por Bután es también un viaje interior.
Consulta más información escribiendo a: kora@koratrek.com
